Buscar en este blog

jueves, 1 de febrero de 2018

ORACIÓN: Tú me miras, Cristo, con infinita misericordia.

 
TÚ ME MIRAS, CRISTO,
CON INFINITA MISERICORDIA

Como uno más en las aguas del Jordán,
sumergiéndote para cargar con nuestros pecados, ...
y señalado por Juan el Bautista, asumiste lo que eras:
«Ese es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo».

Y en las mismas aguas del Jordán,
escuchaste la voz del Padre
que te decía ante la muchedumbre de pecadores:
«Este es mi Hijo Amado, en quien me complazco».

Y fuiste por la vida perdonando pecados,
yo estaba entre los pecadores, también como uno más,
necesitado de tu perdón y misericordia,
y me llamaste para ofrecer tu perdón
a los que se sienten pecadores ante tu mirada misericordiosa.

Y mirándote a los ojos, a los pies de la cruz,
sumergido en el pecado de la humanidad que te crucifica,
miro mi pecado y te miro a Ti,
tantas veces crucificado en mis hermanos los más pobres,
y escucho tu voz alentadora cuando miras al cielo y me miras a los ojos: «Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen».

Y miras y me miras, Cristo, mi Señor,
tanta violencia, cuando tú nos traes la paz;
tanta soberbia, cuando tú nos muestras la humildad;
tanto desprecio e indiferencia ante los demás,
cuando tú nos tratas con suma delicadeza y ternura;
tanta superficialidad y falsedad,
cuando tú nos enseñas la interioridad y la verdad.

Y tus entrañas se conmueven
porque tu misericordia es eterna y quiere alcanzar a todos,
porque pagaste un alto precio para bañarnos en tu infinita misericordia
que la hiciste sacramento, fuente de reconciliación y de paz.

Y ahora me llamas a ser canal limpio de tu gracia para los demás,
a irradiar tu misericordia allí donde me encuentre,
a hacer de la Iglesia, de mi casa y mi corazón, un oasis de misericordia.

Gracias, Cristo, mi Señor, porque me miras con infinita misericordia. Amén.
 
(Pbro. Lázaro Albar) 

No hay comentarios: